miércoles, 4 de mayo de 2011

Filosofemos...

Hoy me he despertado demasiado pronto para lo que me pedía el cuerpo y, en mi dichosa mañana, solo he vagabundeado entre las frases que lograba discernir de pasada. Todo normal, pero ha legado la clase de Fª (filosofía) y hemos empezado con uno de los llamados "Maestros de la Sospecha": Nietzsche.
Frases vagas y sin fuerza, poca repercusión, aburrimiento... bla, BLA, BLÁ.

Sin embargo, algo que ha retumbado en mis oídos me ha despertado de mi vigilia: el "Eterno Retorno".
"El eterno retorno es la repetición, el ciclo que se ejecuta una y otra vez sin proceso lineal posible. El mundo platónico de ideas o el cielo cristiano se basan en una estructura lineal del tiempo y el desarrollo histórico siendo por ello creaciones absurdas ya que no hay un estado final sino una espiral sin fin. El eterno retorno implica que solo existe el presente, lo que vivimos hoy, pues el pasado ya fue y el futuro es incierto y por lo ello, no existe. 
Por esto, el hombre debe ser fiel al presente que vive, un presente eternamente repetido de ciclos que comienzan y terminan sin cesar, fieles al tiempo convirtiéndose en un camino de la vida donde la voluntad de poder (hacer lo que nos marcan nuestros instintos sin reprimirnos por la censura de la razón) se liberal del lastre del pasado y del temor del futuro.
El eterno retorno refleja el deseo de eternidad del presente."
Eso, esas palabras leídas tras escuchar una pequeña frase, ha hecho que me ponga hoy a reflexionar y, entre la montaña de trabajos que tengo, atrasados o no, saque tiempo de lo que el cuerpo más tarde me recriminará a golpe de bostezos para pensar un poco y desembotar mi mente.

Y, ¿qué es el eterno retorno?
Bueno, podemos clasificar-lo como que todo es un círculo en el que solo varían cosas sin importancia, variables, pero en esencia, permanecen constantes las cosas importantes que han marcado la vida desde el principio de los tiempos: felicidad, familia, supervivencia... amistad y amor.

Y si, después de toda esta parrafada vuelvo ha especular acerca de 2 temas que llevan marcando mi vida día si día también afirmando al maestro Nietzsche pero deseando cambios o fallos en la teoría de este.
Si me remonto a menos de 6 meses atrás, la verdad, no había conocido demasiadas experiencias en el 2º campo y, pensándolo de manera crítica, tal vez solo hayan sido 2 las ocasiones en las que he amado a pesar de las muchas veces que he nadado en la 1ª piscina.

Si las cosas son como Nietzsche plantea... bueno, acabaré mi desahogo en que la verdad de este planteamiento es aplastante: mis amigos SIEMPRE han estado a mi lado y parece ser que así será por siempre (o eso espero) pero en el amor... no. espero no cometer los mismos fallos a los que llegaría en esta espiral. Solo merecería la pena recaer en unos labios, hoy, prohibidos.

Quizás todo esto solo sea una triste auto-compadecer donde añoro los recuerdos o mis propia búsqueda de mantener el presente, pero, me gustaría avanzar en una verdadera línea recta.